Los procesos en los que se reclama la paternidad, o aquellos en los que se persigue impugnar la filiación legalmente establecida, exigen un conocimiento profundo del sistema probatorio y de las reglas que ordenan este tipo de procedimientos. La intervención del Ministerio Fiscal como parte del proceso obliga a los abogados a plantear certeramente las reclamaciones o las impugnaciones ante los tribunales.
De esta manera, lo que se pretende no es solo determinar la filiación, y los consiguientes efectos inherentes a la misma, sino también los derechos y obligaciones que surgen como consecuencia de la relación paterno-filial.
Los abogados del área de Derecho de Familia asesoran acerca de la viabilidad de las demandas de paternidad y filiación, así como de impugnación de la misma, planifican la estrategia de prueba más adecuada y plantean las reclamaciones con la voluntad de salvaguardar las relaciones afectivas y los intereses de los menores.
Asimismo, y paralelamente a las reclamaciones judiciales de paternidad y filiación, solicitamos las medidas cautelares necesarias como la atribución de la guardia y custodia de los menores, la concesión de alimentos y el aseguramiento de su patrimonio.